Los problemas del sueño infantil son alteraciones que surgen a lo largo del sueño. Tienen una prevalencia del 30%.
El control del sueño y la vigilia está determinado por nuestro reloj biológico, lo que permite la alternancia de las horas de vigilia y las del sueño.
Horas de Sueño Infantil
Las horas de sueño varían en función de la etapa evolutiva del niño.
- Recién nacido: 16 horas.
- Primer año: 13-15 horas.
- 1-3 años: 12-13 horas.
- 2-4 años: 10-11 horas. A partir de los 3 años va disminuyendo la necesidad de dormir durante el día hasta desaparecer alrededor de los 6 años.
- 5-10 años: 10-11 horas.
- A partir de la Adolescencia: 7-8 horas.
Las necesidades de sueño varían de una persona a otro, no existe un patrón homogéneo de sueño en los niños.
Causas de los problemas de Sueño Infantil
Algunas de las causas que pueden estar originando y manteniendo los problemas son:
- Malos hábitos: relacionados con la higiene del sueño.
- Estrés
- Horarios irregulares
- Problemas familiares
- Miedos infantiles
- Siestas largas
- Ansiedad por separación.
- Enuresis.
Problemas del Sueño Infantil
Los problemas del sueño infantil más frecuentes son:
- Insomnio por malos hábitos: se despiertan por la noche, avisan a los padres y requieren su presencia para volver a dormir.
- Sonambulismo: Suele aparecer entre los 4 y 8 años, desaparece en la adolescencia.
- Bruxismo: rechina los dientes mientras duerme.
- Pesadillas: el niño suele recordar lo que ha soñado y se despierta.
- Terrores Nocturnos: el niño no se despierta, chilla, llora y grita pareciendo que está despierto, pero no lo está. No recuerda lo que ha soñado.
- Síndrome de Apnea del Sueño: pausas respiratorias prolongadas.
- Somniloquia: hablar mientras estás dormido.
Es fundamental que el niño descanse y así pueda tener un buen comportamiento, un buen estado de animo y un buen rendimiento escolar.
Pautas para padres
- Crear una rutina antes de ir a la cama (ponerse el pijama, lavarse los dientes, leer un cuento…)
- Evitar actividades físicas cerca de la hora de dormir.
- Evitar bebidas con cafeína.
- Crearle un buen ambiente antes de irse a la cama y en la propia habitación que propicie el sueño (ruidos, luz….)
- Establecer un horario para dormir.
Cuando se apagan las luces, se encienden los sueños.